Ejercicio físico

¿Por qué se recomienda realizar ejercicio?

En pacientes con FQ, es aún más importante la práctica de ejercicio porque va a ayudar a contrarrestar algunos de los problemas asociados con la enfermedad: sentir menos fatiga general y menos sensación de ahogo (disnea). También facilita las actividades diarias y cotidianas como dar un paseo o subir unas escaleras.

Son muchos los beneficios que obtiene nuestra salud cuando hacemos ejercicio. Beneficios físicos, pero también psicológicos: contribuyen a mejorar la salud mental, a reducir el estrés y a potenciar las habilidades cognitivas. 

En pacientes con FQ, es aún más importante la práctica de ejercicio porque va a ayudar a contrarrestar algunos de los problemas asociados con la enfermedad: sentir menos fatiga general y menos sensación de ahogo (disnea). También facilita las actividades diarias y cotidianas como dar un paseo o subir unas escaleras.

La primera recomendación es que camines o realices bicicleta estática entre 15-30 minutos todos los días, intentando llevar un control ventilatorio mientras lo hacés, por ejemplo, soplando el aire por la boca con los labios fruncidos y tomando el aire por la nariz. 
¿Qué tipos de ejercicios podemos incluir?
  • Ejercicios respiratorios.
  • Ejercicios de fortalecimiento.
  • Ejercicios aeróbicos

¿Qué necesitamos para poder llevar a cabo estos ejercicios?

  • En primer lugar, es muy importante mantenernos motivados, cumpliendo objetivos realistas e incentivándonos a nosotros mismos a continuar a diario con estos ejercicios.
  • Usar ropa cómoda mientras, que no sea demasiado apretada y que permita movernos con facilidad.
  • Un lugar adecuado, sin distracciones y que nos permita estar enfocados en el ejercicio.
  • Evitar hacer ejercicios 2-3 horas después de una comida principal y descansar los siguientes 30-60 minutos tras realizarlos.
  • Descansar SIEMPRE que se necesite.

No items found.
Latest news